Acompáñenme a conocer esta historia.

La Sra. X es una mujer menopáusica. No se atreve a comentarlo, pero tiene muchas molestias en sus relaciones sexuales. Tiene dolor y, a veces, observa un ligero sangrado. También siente mucha resequedad genital, y es frecuente que tenga flujos, por lo que le recetan a cada rato óvulos con medicamentos, los cuales no resuelven el problema, sino que repiten las molestias, comezón y ardor.

A veces la Sra. X siente que se le escapa la orina, sobre todo cuanto tose o se ríe, o cuando hace algún esfuerzo o ejercicio. Incluso nota que orina frecuentemente por la noche, algo terrible, porque no duerme bien y se despierta cansada.

La Sra. X no sabe que esos síntomas son propios de la menopausia: debido a la falta de hormonas y a que las mucosas tienen cambios que modifican el pH, aumentan las infecciones de repetición. Además, nuestra amiga no sabe que estos cambios también afectan su capacidad orgásmica y de satisfacción sexual.

Todo estos síntomas tienen un nombre médico «Síndrome Genitourinario de la Menopausia», y se puede corregir con hormonas bioidénticas; también con láser, factores de crecimiento y una serie de tratamientos regenerativos para volver a ser la de antes.

¿Y tú sientes lo mismo que la Sra. X?