Los disruptores endocrinos son sustancias químicas que pueden interferir con el sistema endocrino, el cual regula funciones vitales en nuestro cuerpo a través de las hormonas. Estas sustancias pueden imitar o bloquear las hormonas naturales y alterar su producción o degradación, afectando nuestra salud de diversas maneras.

Desarrollo y reproducción: Pueden causar efectos adversos en el desarrollo y la reproducción, como infertilidad, abortos espontáneos, y problemas en el desarrollo fetal.

Cáncer: Algunos disruptores endocrinos están asociados con un mayor riesgo de cáncer, especialmente cáncer de mama.

Sistema inmunológico y neurológico: Pueden afectar el sistema inmunológico y neurológico, aumentando la susceptibilidad a enfermedades autoinmunes y trastornos del desarrollo neurológico.

Obesidad y diabetes: Se ha demostrado que ciertos químicos disruptores pueden contribuir a la obesidad y a trastornos metabólicos, aumentando el riesgo de diabetes y enfermedades cardiovasculares.

Ejemplos comunes de disruptores endocrinos que se encuentran en productos y ambientes cotidianos:

Bisfenol A (BPA)

• Dónde se encuentra: En plásticos, especialmente en botellas de agua y recipientes de alimentos, así como en el revestimiento de latas de alimentos.
• Efectos: Puede imitar el estrógeno en el cuerpo, lo que puede afectar la reproducción, el desarrollo fetal y aumentar el riesgo de cáncer de mama.

Ftalatos

• Dónde se encuentra: En plásticos flexibles, como juguetes, cortinas de baño, envases de alimentos, así como en productos de cuidado personal como champús, perfumes y lociones.
• Efectos: Pueden interferir con la producción de hormonas sexuales, causando problemas de fertilidad, desarrollo genital anormal en los niños, y pueden contribuir a la obesidad.

Parabenos

• Dónde se encuentra: En conservantes usados en cosméticos, productos para el cuidado personal como champús, lociones y maquillaje.
• Efectos: Pueden imitar el estrógeno en el cuerpo y están asociados con un mayor riesgo de cáncer de mama y problemas reproductivos.

Policloruro de Bifenilo (PCB)

• Dónde se encuentra: Aunque están prohibidos desde los años 70, aún se encuentran en el ambiente debido a su persistencia. Se encuentran en aceites industriales, plásticos y pinturas.
• Efectos: Pueden afectar el sistema inmunológico, causar disfunción tiroidea y están vinculados a problemas reproductivos.

Dioxinas

• Dónde se encuentra: Se generan como subproductos de procesos industriales y de la quema de ciertos materiales. Se acumulan en la cadena alimenticia, particularmente en los productos animales.
• Efectos: Pueden alterar los niveles hormonales, afectar la función reproductiva, y están relacionadas con un mayor riesgo de cáncer.

Pesticidas (como el DDT)

• Dónde se encuentra: En productos agrícolas, aunque algunos como el DDT están prohibidos, persisten en el ambiente.
• Efectos: Pueden interferir con el desarrollo sexual y la fertilidad, y se han asociado con cáncer y otros trastornos crónicos.

Compuestos Perfluorados (PFAS)

• Dónde se encuentra: En productos resistentes al agua y a las manchas, como utensilios de cocina antiadherentes, envases de alimentos y ropa impermeable.
• Efectos: Pueden interferir con la función hormonal, afectar la función tiroidea y aumentar el riesgo de obesidad.

Clorpirifos

• Dónde se encuentra: Es un pesticida usado en cultivos alimenticios.

Efectos: Puede interferir con el desarrollo del cerebro en fetos y niños pequeños, y se ha relacionado con problemas de comportamiento y aprendizaje.

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Algunas formas de evitar nuestra exposición a los disruptores endócrinos son:

• Usar productos seguros: Preferirlos sin químicos dañinos.
• Controlar el polvo: Ventilar bien los espacios y mantenerlos sin polvo.
• Consumir orgánicos: Preferirlos sobre los procesados y evitar los plásticos en la cocina.